Si estás planeando un viaje a un destino exótico y alejado de las grandes concentraciones, quizá una isla te transporte a uno de estos puntos mágicos que nos permiten encontrarnos, olvidarnos de nuestro mundo por unos días y desconectar a un nivel que nunca imaginamos. Las islas exóticas con sus playas de arenas blancas y aguas color turquesa nos seducen. Algunos las tienen en sus ordenadores de sobremesa como salvapantallas o como fondo de escritorio. Otros atesoran las fotos que hicieron en un viaje ya remoto y todos soñamos con viajar a uno de estos destinos para descansar, tomar el sol, bucear o interactuar con los habitantes locales.